Aun estando rodeados de agua de mar su utilización para el uso humano, animal, agrícola o incluso industrial no es factible. Los métodos más conocidos, osmosis inversa, consumen grandes cantidades de energía eléctrica, alto mantenimiento y constante renovación de membranas con un importante impacto sobre el medio ambiente debido al consumo energético y la devolución al mar de la salmuera.

La tecnología IKERA RD8 tiene un coste operativo muy bajo gracias a la ausencia de membranas y al uso principal de energía térmica que puede ser satisfecha 100% por energía renovables.

Además como modelo de negocio tiene dos fuentes de ingresos: el agua y las sales/minerales que la contienen.

Procesos de desalinización a baja temperatura y presión no es nada nuevo pero el rediseño completo realizado sí lo es, teniendo como grandes ventajas su versatilidad, facilidad de implementación y escalado.

La energía térmica es la principal fuente de energía utilizada que puede ser procedente de energías renovables como CSP, MINI-CSP, FVT, geotermia, biomasa, calor residual o una mezcla de varias. También de fuentes no renovables o un combinado de renovables y no renovables.

Para zonas áridas  se recomienda principalmente CSP.

Mientras las temperaturas de CSP pueden alcanzar los 420º C trabajamos con intercambiadores de calor que nos facilitan la temperatura rango de entre 40º C y 80º C y gracias al exceso de energía podemos trabajar durante las horas de la noche.

El agua de mar o acuífero accede en continuo a un depósito de homogeneización que alimenta el reactor físico RD8, en el que solo se evapora H2O, para despues ser condensada y mineralizada según el uso requerido.

La tecnología no requiere de membranas y el uso de electricidad es mínimo.

Por otro lado, la parte sólida, sales y minerales, con humedad ajustable hasta el 0,2%, se transfiere a depósitos en seco según uso posterior requerido: venta al por mayor, extracción de minerales, cristalización de diferentes sales, extracción de litio, etc.

En plantas de ósmosis inversa ya instaladas también puede hacerse cargo de la salmuera revalorizando las sales y minerales del mar al igual que la recuperación total del agua.  Dicha salmuera tiene una proporción de agua/sales y minerales 30% / 70% o inferior por lo que el coste de revalorización de sales y minerales puede ser factible con tecnologías paralelas adecuadas especialmente la extracción de litio.

Gracias a la facilidad de implementación de las plantas Ikera RD8 y la facilidad de conseguir energía térmica se podrían ejecutar de manera descentralizada disponiendo de mayor número de plantas repartidas por la geografía pero de menor tamaño evitando así desplazamientos de agua entre ciudades del litoral.

También cabe la opción de implementarlas en el interior trabajando con agua de alta concentración salínica desde el subsuelo.